Guillermo Teillier, presidente del Partido Comunista de Chile y su candidato presidencial para las elecciones de diciembre de 2009, visitó Madrid el 2 y 3 de diciembre. Se reunió con Cayo Lara, coordinador general de IU, y Francisco Frutos, secretario general del PCE, y participó en el acto «La izquierda y los desafíos democráticos de Chile en la encrucijada del Bicentenario», celebrado en un salón de actos del CAUM que se llenó para escuchar la propuesta política del principal partido de la izquierda chilena.

Teillier ingresó en las Juventudes Comunistas en 1957 y durante los días del gobierno de la Unidad Popular fue secretario regional del Partido en Valdivia. Fue detenido en 1974, sufrió atroces torturas y estuvo desaparecido a manos de la Fuerza Aérea durante seis meses y después, un año y medio preso en campos de concentración. En 1977, cuando la dictadura había asesinado a dos direcciones clandestinas completas, asumió junto con otros dos compañeros la dirección interior del Partido y prepararon las condiciones para su reconstrucción y el retorno de dirigentes exiliados.
En los años 80, fue el responsable de la política militar del PCCh en un momento histórico en que su política de Rebelión Popular de Masas contra la dictadura estimuló enormes movilizaciones y alumbró la formación del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. En marzo de 2005, cuando falleció Gladys Marín, asumió la máxima responsabilidad política del Partido de Recabarren, Neruda, Víctor Jara y Gladys Marín.

Mundo Obrero: ¿Cómo valora el resultado de las elecciones municipales de octubre?
Guillermo Teillier:
Me da la impresión de que los nichos electorales se mantienen más o menos igual. Por una parte, la derecha mantuvo la votación y la Concertación, que sigue siendo mayoría en el país, bajó pero, más que por la derecha, por la aparición del PRI, que obtuvo el 7% de los votos. En cuanto al resultado de la izquierda en las elecciones municipales, bajó el número de nuestros concejales como coalición Juntos Podemos Más, pero como Partido Comunista subimos nuestros concejales, con una novedad significativa ya que la mayor parte de ellos fueron electos en las principales ciudades del país, como Santiago (por primera vez desde 1973), Florida, Maipú o Valparaíso. Fue muy buena la elección de concejales.
Además, mantuvimos tres de las cuatro alcaldías que teníamos, puesto que perdimos Canela por la alianza de un sector del PPD con la derecha; una pena, ya que Nathan Trigo había sido un excelente alcalde y perdió por muy pocos votos. También ganamos como Juntos Podemos Más otras cuatro alcaldías, algunas como Yumbel o Lota con la alianza decisiva con el MAS de Alejandro Navarro y otras, como Pedro Aguirre Cerda, con el apoyo de la Concertación y nuestra compañera Claudina Núñez como alcaldesa electa.
La izquierda tiene cada vez más fuerza y esto permite que cada día más sectores de la Concertación busquen un programa distinto. Sólo así puede evitarse que la derecha asuma el gobierno en 2010, lo que supondría el final de la posibilidad de reformas políticas y económicas, el estancamiento del tema de los derechos humanos, la persistencia de las leyes laborales de la dictadura o la privatización de las pocas empresas públicas que quedan, como Codelco.

Mundo Obrero: El Partido Comunista ha levantado su candidatura presidencial en la mejor tradición de su historia casi centenaria: con el objetivo de unir a la izquierda y al pueblo en torno a un programa político para transformar la realidad chilena. Ahora mismo hay cuatro candidatos de izquierda: dos procedentes del Partido Socialista, uno humanista y usted. ¿Cómo se llegará a la unidad de los sectores que apuestan por superar el modelo neoliberal impuesto por la dictadura y mantenido de manera acrítica por la Concertación?
G.T.:
En el próximo Pleno del Comité Central estudiaremos nuestra propuesta para la elaboración del programa y la elección del candidato y sobre cómo enfrentar las elecciones parlamentarias para poner fin a la exclusión. Sin embargo, previamente a esto tenemos que aclarar con las otras tres candidaturas presidenciales tres aspectos esenciales. En primer lugar, debe haber un programa único y dilucidar cómo se construye para constituir una alternativa social y política al neoliberalismo que tenga continuidad. En segundo lugar, todos los candidatos deberían apoyar al candidato finalmente elegido por el método que se priorice. Y, en tercer lugar, esta alternativa debe de tener como objetivo poner fin a la exclusión de la izquierda del Congreso Nacional y esto implica tener claro que no elegiremos parlamentarios en 2009 si levantamos una lista propia de candidatos en esta alternativa. Es muy posible que la derecha gane las próximas elecciones presidenciales; si es así, lo mejor es que nos pille con una alternativa de izquierdas constituida y con representación en el Parlamento.

M.O.: En su discurso de junio de 2007 en el Teatro Caupolicán, con motivo del 95º aniversario de la fundación del Partido Comunista, reconoció el viraje en la política del Partido. ¿Por qué se ha producido este cambio tan llamativo en la línea política del PCCh?
G.T.
: El elemento principal ha sido que tenemos que hacer un esfuerzo por establecer una línea de acción con dos puntos esenciales. En primer lugar, está la lucha social de masas que tienda a la unidad de los trabajadores y ahí estuvo la movilización de los trabajadores subcontratistas del cobre, con nuestros compañeros al frente, que ya triunfaron con sólo obligar a sentarse a negociar con ellos a los auténticos dueños de las empresas. Otros ejemplos son las luchas de los salmoneros o de los obreros forestales.
Y como segundo punto está nuestra decisión de disputar la centralidad política y lo hemos logrado ya que hemos sido capaces de conversar con todo el mundo, de buscar convergencias para objetivos específicos, como la recuperación de los derechos de los trabajadores o la reforma profunda de la ley electoral. Forzamos a la Concertación a que se pronunciara sobre su voluntad de cambiar el sistema electoral y el pacto por omisión que acordamos para las municipales fue sobre todo una señal al país de que ambos conglomerados coincidimos en la necesidad de concretar reformas políticas que pongan fin a la exclusión política de la izquierda en Chile. El viraje ha dado sus frutos, el Partido Comunista es hoy más fuerte, más visible, está más relacionado con las luchas de los trabajadores, de los estudiantes, de los sectores medios que se están movilizando.

M.O.: ¿Por qué conceden tanta importancia al fin de la exclusión de la izquierda en Chile?
G.T.:
El Partido Comunista sólo coincide con la Concertación en la necesidad de acabar con la exclusión política en Chile. Hemos preferido mantener nuestra independencia, pero pensamos que podemos converger con la Concertación y otras fuerzas para poner fin a la exclusión de los trabajadores del Congreso Nacional. ¿Por qué es tan importante para nosotros tener parlamentarios? En primer lugar, para llevar al Parlamento las luchas sociales. Además, en Chile no se puede aprobar ninguna ley en la actualidad sin el apoyo de la derecha y elección tras elección se reproduce en el Congreso Nacional el empate político entre la Concertación y la derecha. Queremos acabar con la exclusión, cambiar la correlación de fuerzas en el Parlamento… y seguir adelante.

* Doctor en Historia y periodista. Su último libro es Compañero Presidente. Salvador Allende, una vida por la democracia y el socialismo. PUV. Valencia, 2008.