Así de contundente se mostraba Cayo Lara en una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, el pasado viernes día 10 de febrero al valorar la reforma laboral aprobada por el Consejo de Ministros unas horas antes.
Cayo Lara rechazó que la reforma laboral presentada vaya a crear más empleo y que muy al contrario lo que hace es “hace el despido más fácil y más barato, legaliza el trabajo precario, acaba con la negociación colectiva y convierte a los parados con prestación en voluntarios forzados”.
Cayo se mostró poco confiado en que se vayan a producir cambios sustanciales en el texto de la reforma, de ahí la necesidad con más fuerza si cabe, de una amplia movilización ciudadana.
Preguntado sobre la convocatoria de una huelga general, expresó que esa tarea le corresponde a los sindicatos.
Cayo Lara valoró como muy regresivos los distintos aspectos contemplados en la reforma: abaratamiento del despido; eliminación de la autorización administrativa para los ERES; desproteger a más del 85% de los trabajadores del paraguas de la negociación colectiva; hacer procedente prácticamente cualquier despido y con una indemnización de 20 días, etc.