UN BISABUELO “MUDO”
Alexander Sergueevich Pushkin nació en el año 1799 en la Nemetskaia Sloboda de la ciudad Moscú. Sloboda era el nombre de los barrios de algunas ciudades o de poblados y aldeas en los que sus habitantes, en el momento de su fundación eran libres, no tenían ningún tipo de vínculo de servidumbre y se encontraban al servicio del Estado.
Nemi o nemoi, significan en lengua rusa mudo. Antiguamente se aplicaba también a aquellas personas que no sabían hablar en ruso, es decir a los extranjeros. Toda vez que una parte importante de los extranjeros que vivían en la Rusia europea eran de origen alemán, con el tiempo el concepto evolucionó y pasó a designar a los alemanes. Así, por ejemplo, el barrio de Moscú conocido como Nemetskaia Sloboda sería en origen “el barrio de los extranjeros libres que no hablan ruso” aunque con la evolución que explicábamos antes, con el paso del tiempo, pasó a significar “el barrio de los alemanes libres”.
El caso es que en la “Sloboda” en la que nació Pushkin vivieron desde su fundación europeos de varias nacionalidades y procedencias, muchos de ellos mercenarios y antiguos prisioneros al servicio del Estado ruso que alcanzaron alta graduación militar y buena situación social y económica. Es muy probable que la familia de su madre, Nadezhda Osipovna Hannibal, tuviera casa en dicho barrio por haber sido su bisabuelo, Abraham Petrovich Hannibal, un extranjero “nemoi” al servicio del Estado ruso.
Pero aquel bisabuelo no fue un alemán, sino un esclavo negro, al parecer procedente de Abisinia, que fue capturado junto a su hermano a la edad de siete años y enviados los dos como esclavos al palacio del Sultán otomano en Estambul. Más tarde, Savva Raguzinskii, embajador ruso en la corte del Sultán, compró a los dos hermanos y se los llevó consigo a Moscú para hacer un regalo exótico al zar Pedro I. Hay otra versión que dice que los dos chicos fueron comprados personalmente por Pedro I en Holanda, a la vuelta de uno de sus viajes de incógnito a este país para aprender la técnica de construcción de barcos en los astilleros holandeses.
De una u otra manera, el caso es que aquellos chicos negros llegaron a la corte del zar. Uno siguió una vida tranquila y apenas quedan referencias escritas de él. Otro, pasó a desempeñar importantes misiones para Pedro I, obteniendo muy pronto alta graduación militar. Tras la muerte del zar tuvo tiempo de verse envuelto en intrigas de palacio por lo que fue exiliado a Siberia, de donde volvió tiempo después para continuar en el servició militar activo. Fue un importante ingeniero, llevando a cabo diferentes obras de infraestructura. También jugó un papel fundamental en la introducción del cultivo de la patata en Rusia.
EL MUSEO-RESERVA NATURAL DE MIJAILOVSKOE
Como recompensa por los servicios prestados al Estado, el general Abraham Hannibal recibió en 1742 las haciendas de Mijailovskoe y Petrovskoe en las frondosas y también pantanosas tierras de la región de Pskov. En el año 1781, Mijailovskoe pasó a ser propiedad del abuelo de Pushkin, Osip Hannibal, que reconstruyó la casa principal y plantó el parque que todavía se conserva.
El acceso a la hacienda es en sí espectacular, ya que hay que atravesar a pie un bosque de árboles robustos y tan altos que rascan el vientre algodonado de las nubes que llegan desde el mar Báltico. Tras el bosque, el parque también frondoso y cruzado por caminos y sendas múltiples. Después, el jardín y la modesta casa principal de la hacienda, los pabellones auxiliares a derecha e izquierda… y cuando rodeamos la casa y miramos al frente, vemos el amplio paisaje que se abre desde el balcón natural, a la izquierda el pequeño lago Malenets que descarga su pequeña contribución de agua en un pequeño río, el Sorot, que discurre en el fondo de un valle sin tener muy seguro en qué dirección han de correr sus aguas que forman una zona pantanosa cuando entran al lago Kuchane, del que vuelve a salir apenas unos metros más adelante.
En 1818 la hacienda fue heredada por la madre de Pushkin, Nadezhda Hannibal, aunque la señora ya estaba establecida en la casa cuando Pushkin visitó por primera vez Mijailovskoe en el año 1817. Más tarde volvió para cumplir allí su condena de exilio en forma de arresto domiciliario, desde agosto de 1824 a septiembre de 1826. Volvió en contadas ocasiones: en 1827, en 1835 y en 1836 para el entierro de su madre. La hacienda fue heredada por el poeta en el año 1837 y tras su muerte en enero de aquel mismo año, la heredaron sus cuatro hijos.
Finalmente, la casa y demás construcciones fueron degradándose paulatinamente hasta su casi total deterioro. En 1848 hay testimonios de su calamitoso estado. En 1866, Gregorii Pushkin, hijo menor del poeta, se trasladó a Mijailovskoe y la restauró. Más tarde fue comprada por el Estado que la entregó para su gestión al comité aristocrático de Pskov. En 1908 la casa ardió por completo, siendo reconstruida un año después. En 1911 hubo un intento de convertirla en una residencia para ancianos escritores que fracasó. En 1918 fue asaltada e incendiada por campesinos en plena revolución.
Vista del lago Kuchane desde la hacienda de Mijailovskoe, al pie de la casa de Pushkin | Foto: Diego Fernández
Cerca de Mijailovskoe, también a orillas del lago Kuchane, se encuentra Petrovskoe, la hacienda principal de los Hannibal. En 1871, pasó al segundo hijo de Abraham, Piotr Hannibal y en 1825 al hijo de éste, Veniamin Hannibal. A su muerte, pasó a manos ajenas a la familia de los Hannibal-Pushkin. En el año 1918 fue también incendiada por los campesinos, quedando en pie el espectacular parque que no fue talado ni dañado. En el año 1936, en vísperas de la conmemoración del centenario de la muerte del poeta fue incluida en el Museo-Reserva Natural de Mijailovskoe.
También forma parte del Museo-Reserva la hacienda de Trigorskoe, lugar habitual de reunión de escritores y artistas, que perteneció a la familia de Praskovia Alexandrovna Osipova-Vulf y su esposo, amigos íntimos de Pushkin, y que éste visitaba con frecuencia, siendo un asiduo lector de la fenomenal biblioteca que albergaba. La casa principal era particular en su construcción por ser de planta rectangular muy alargada. Ardió también a manos de iracundos campesinos que no tuvieron compasión de ella. En el año 1922 todo el territorio de la hacienda fue incorporado al Museo-Reserva Natural de Mijailovskoe y en el año 1962 la casa fue reconstruida sobre sus cimientos originales gracias a los planos y fotografías que de la misma se conservaban.
PUSHKIN Y LA MUERTE
Pushkin fue un aristócrata vinculado en lo político al movimiento decabrista, que pretendía una radical reforma de la vida política y social de Rusia. El fracaso de la insurrección de diciembre de 1825 en S. Peterburgo supuso la aniquilación física de algunos de sus protagonistas y el envío a presidio y el exilio en Siberia del resto. Pushkin ya era un genio literario reconocido por todos en la corte y en las ciudades de toda Rusia, y aquella fama y reconocimiento le dio una cierta inmunidad ante la represión política.
Evitó el destierro a Siberia y el encarcelamiento por encontrarse en el momento de la insurrección en exilio domiciliario en la hacienda familiar de Mijailovskoe, pero quedó en el punto de mira de la policía y de todos sus enemigos políticos que no pararon hasta conseguir su muerte. Una verdadera conjura que superó cualquier argumento literario. La excusa: un asunto de honor. Un joven francés, Georges-Charles de Heeckeren D’Anthès, se empeñó en cortejar y seducir a su esposa provocando una y otra vez situaciones comprometidas que luego eran puestas en conocimiento público a través de notas y hojas anónimas que distribuían por todo S. Peterburgo y que expresamente hacían llegar al poeta, a su amigos y familiares. Al menos dos veces el galán francés y Pushkin se retaron a duelos que luego quedaron en suspenso. Sin embargo, en un momento determinado de finales del año 1836, una figura poderosa dio el visto bueno a la «ejecución» del poeta. Y D’Anthès, el galán francés que poco antes había contraído matrimonio con la hermana de la esposa de Pushkin, volvió a cortejar y a provocar de nuevo la necesidad de un duelo reparador del honor.
El 27 de enero de 1837, a las cinco de la tarde, hora lorquiana, trágica por excelencia, Pushkin, como si fuese un personaje de alguna de sus obras, recibió un disparo en el vientre que le provocó la peritonitis que le produjo la muerte el 29 de enero de 1837.
Murió en su apartamento en S. Peterburgo, donde tuvo tiempo de escribir una carta al zar y de despedirse de familiares y amigos. La noticia de su fallecimiento corrió por toda la ciudad como un reguero de pólvora y en la ceremonia de despedida cuentan las crónicas que se concentraron más de cincuenta mil personas para decir adiós al poeta. Luego su cuerpo fue trasladado en secreto a la necrópolis familiar de los Hannibal-Pushkin en el monasterio de Sviatogorskii Sviato-Uspenski, donde fue enterrado, casi a escondidas, el seis de febrero de 1837. En el año 1922, el Poder Soviético incorporó el monasterio al Museo-Reserva Natural de Mijailovskoe.
(*) Historiador