Los trabajadores y las trabajadoras del campo extremeño no pueden más y así lo han demostrado secundando masivamente la primera jornada de huelga convocada. Son años de abusos en los que no se ha pagado el salario mínimo, ni las horas extras a su precio -si es que las pagan-, o pluses como el del transporte.

Ha sido la propia patronal, con su ansia de maximizar beneficios a costa de la clase trabajadora, la que ha creado las condiciones para que un clamor de rebeldía y dignidad haya recorrido toda Extremadura.

“Queremos un jornal justo. Seis horas y media de jornada y nuestros 15 minutos para el bocadillo. En definitiva un convenio digno” esa ha sido la reivindicación que los jornaleros y jornaleras han repetido una y otra vez desde primera hora de la mañana que comenzaban a concentrarse a las puertas de los tajos.

Una explosión de . Tal ha sido el éxito y la aceptación de la convocatoria, que los trabajadores y trabajadoras que no entraban a trabajar se han unido a los piquetes y han realizado cortes de carreteras en distintos puntos de Extremadura.

En declaraciones a los medios de comunicación, los sindicatos de clase convocantes del paro han confirmado el éxito de la primera de las tres jornadas de huelga en el campo, exigiendo el desbloqueo del convenio colectivo y trabajo con dignidad.

«La mayoría de los trabajadores está parando. Si después de estos tres días no se llega un acuerdo, haremos lo que decidan los trabajadores, pero intuyo que seguiremos con esta huelga hasta que la patronal firme los derechos salariales y laborales que la gente le está reclamando a la puerta de sus empresas» ha manifestado Satur Lagar, Secretario General de CCOO de Industria de Extremadura.