Un total de 72 exdiputados que respaldaron en 2019 la autoproclamación de Juan Guaidó como “presidente encargado de Venezuela” aprobaron este viernes la eliminación del llamado «Gobierno interino», una instancia que contaba con el reconocimiento de Estados Unidos y un pequeño grupo de países, después de que la Unión Europea y la mayoría de los países que lo habían respaldado, le retiraran el reconocimiento.
Los exparlamentarios, reunidos de manera virtual, ratificaron esta decisión -que ya habían aprobado en una discusión la semana anterior-, pese al rechazo de un pequeño grupo que defendía la continuidad del interinato.
Los exparlamentarios acordaron mantener activa la Asamblea Nacional (Parlamento) elegida en 2015 (cuyo mandato caducó hace dos años) que no reconoce la legitimidad del Legislativo instalado en 2021, de mayoría chavista, únicamente para legislar en torno a la protección de los recursos de Venezuela en el extranjero, que hasta ahora han sido controlados por el «Gobierno interino», en medio de escándalos de corrupción y mala administración.
“La decisión fractura la unidad de la coalición opositora y desmantela la estrategia apoyada por Estados Unidos y la mayoría de los países latinoamericanos y europeos durante los últimos cuatro años para promover la salida del mandatario Nicolás Maduro, y da inicio a una nueva etapa con las elecciones presidenciales de 2024 en el horizonte”, dice BBC.
La revista colombiana Semana, de línea uribista y furibundamente anti-chavista, tituló que Guaidó «hizo el oso en las redes sociales», al emitir un video de 15 minutos en el que no se escuchaba nada.

El video fue posteriormente editado, con este resultado:
Senador estadounidense: «Un error vergonzoso tras otro»
Guaidó es un muñeco roto de la estrategia golpista liderada por Estados Unidos contra el legítimo Gobierno de Venezuela, que ha sido secundada acríticamente por la Unión Europea y 60 países en total, entre ellos España. No son teorías conspiranoicas. El senador demócrata Chris Murphy lo expresaba con absoluta transparencia en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EEUU en 2020:
«Primero creímos que reconocer a Guaidó como presidente sería suficiente para derrocar el régimen. Luego creímos que poner ayuda en la frontera iba a ser suficiente. Luego tratamos de construir una especie de golpe de Estado en abril del año pasado que nos estalló en la cara, cuando todos los generales que se suponía que iban a romper su relación con Maduro decidieron quedarse a su lado al final. Socavamos los diálogos de Noruega el verano pasado y sacamos un marco de transición que sinceramentee es casi una copia de la que presentaron a los partidos el año pasado. Yy ahora, después de haber perdido todo este tiempo, tenemos unas elecciones que están a punto de celebrarse en las que Guaidó y la oposición rechazan participar. Y entonces, nos han puesto en una posición en la que estamos reconociendo a alguien como «líder de Venezuela» que no controla el Gobierno, ni a las Fuerzas Armadas y que ni siquiera ocupa el cargo. Nosotros no hacemos esto en otro lugares»
El Gobierno presidido por Pedro Sánchez se jactó de haber liderado el reconocimiento de Guaidó como presidente paralelo de Venezuela, y la exministra de Exteriores, Arancha González Laya, lo recibió oficialmente durante su visita a España en enero de 2020:
Pero si alguien se volcó en honores fue la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que creó una medalla internacional ad hoc para Guaidó y le cedió el chalet de 2000 m2 conocido como «La Casita», propiedad del Canal de Isabel II, para una cita privada del «presidente encargado» con su padre:
Madrid, capital de Narnia
De hecho, el Ayuntamiento de Madrid, gobernado por PP y Ciudadanos, se deshizo en halagos al autoproclamado «presidente encargado» y llegó a entregarle las llaves de oro de la ciudad:
Antonio Ecarri, abogado de partido opositor Acción Democrática que fue designado embajador en España por Juan Guaidó, debe comunicar al Ministerio de Asuntos Exteriores la conclusión de su «trabajo diplomático», que ha incluido acuerdos con la Comunidad de Madrid para deteriorar la salud pública madrileña y precaria las condiciones de trabajo de los médicos importando facultativos venezolanos en condiciones precarias:
El Tribunal de Narnia se oponía a eliminar el interinato
Otra pseudo-institución paralela, el autoproclamado Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela en el exilio, ordenó a semana pasada mantener el gobierno interino del líder opositor Juan Guaidó, al recordar a los ex diputados elegidos en 2015 que no se puede eliminar la figura de la presidencia encargada como pretende la mayoría de los partidos políticos del antichavismo.
En un pronunciamiento escrito, este tribunal, cuyas decisiones no tienen ningún efecto en la burocracia de Venezuela, aseguró que “pretender la sustitución de la persona del presidente no debe implicar la eliminación de la institución de la presidencia interina”.
Subrayó que la designación o ratificación de este cargo, para el que Guaidó fue proclamado en 2019, corresponde al Parlamento elegido en 2015 -cuyo período venció en enero de 2021- y debe recaer sobre la persona que los ex diputados escojan para liderar esta Cámara, sin poder real dentro de Venezuela.
Henrique Capriiles: «Ya basta de ese modus vivendi»
El opositor golpista venezolano Henrique Capriles reclamó este lunes el fin del llamado Gobierno interino que encabeza Juan Guaidó desde 2019 -con la promesa de lograr elecciones libres-, al considerar que es una “política que fracasó” y se convirtió en un sistema que beneficia a un puñado de dirigentes y no a los ciudadanos.
Capriles, dos veces candidato presidencial, cuestionó que Guaidó busque renovar en 2023, para un quinto año, la llamada “presidencia encargada” que fue creada en enero de 2019 con el propósito de convocar a elecciones presidenciales en un plazo de 30 días. “Si algo pudiera decir yo a quienes tienen la responsabilidad de tomar una decisión (de votar para la continuidad o no del Gobierno interino) es que no se dejen chantajear, ya basta de ese modus vivendi”, señaló Capriles en una conferencia de prensa, en Caracas.