Julio Anguita tiene un nuevo libro: Lo firmó en la Feria del Libro de la Fiesta del PCE, y pocos días después, el 21 de septiembre, lo presentó en el Círculo de Bellas Artes en medio de gran expectación y con lleno hasta la bandera. Se trata de un libro de memorias y vivencias contado desde la plena libertad del que, como él, camina ligero de equipaje. La obra comienza con una biografía que se va diluyendo para dar paso al discurso político. Julio habla desde la templanza que da el transcurso de los años, con los recuerdos decantados y los posos sedimentados. «El libro se trata simplemente de lo siguiente» -explica – «un 29 de octubre Gaspar Llamazares es elegido coordinador general de Izquierda Unida y yo me voy. En la rueda de prensa les dije a los periodistas: Primero, estaré dos años callado; segundo, no intervendré en las luchas internas que puedan producirse, públicamente, quiero decir; y en tercer lugar, en su momento ya diré lo que opino». Y ese momento ha llegado. El momento de recordar.
Para Anguita, la política es la ciencia y el arte de transformar la realidad; un arte agrario que comienza con el arado del terreno, la siembra…. hasta que llega el día de la cosecha. Las cosas llevan su tiempo, aunque no esté de moda: «Nunca consentiré que la política sea el eslogan de hoy, la declaración de mañana y el olvido del día siguiente». Ese es su concepto de la política que siempre ha defendido Anguita.
Una política que nunca abandonará «ni muerto». Lo único que ha dejado es los cargos públicos, criticando de paso que hoy día el concepto de política se haya limitado a ejercer de concejal, alcalde o diputado. Anguita sigue militando: «Soy un combatiente en la búsqueda de lo colectivo, de hacer viable una respuesta que sirva para vivir mejor, un combatiente que no renuncia a seguir luchando, entre otras cosas porque se siente gratificado en esa lucha. Un combatiente que quiere transformar el yo en nosotros, un nosotros consciente, rebelde, creador de nuevas posibilidades».
Ese impulso combatiente del ex secretario general del PCE y ex coordinador de Izquierda Unida no se agota en este libro. Lo próximo será hablar de la III república, ya que de la II ya se ha dicho bastante. Y también quiere explicar lo que es la Izquierda en 2006, para evitar apropiaciones indebidas del concepto, como cuando Zapatero se dirigió a Llamazares diciendo aquello de que «yo también soy de izquierdas, pero del 2006».
El ex alcalde de Córdoba dijo que los políticos tienen la responsabilidad de hacer pensar a la gente porque son muchos los retos que tenemos que afrontar, desde la construcción del Estado español y qué tipo de país queremos, a la construcción de Europa. Este libro es su contribución personal a conseguir un mundo digno y justo para todos, pero es también, como él mismo expone, una obra para que la gente conozca poco a poco a quien ha sido tan mesiánico, y tan mitificado, en el sentido de la divinización y de la satanización, probablemente el político que más veces ha estado en las orcinas y menos en las urnas. Ironías de nuestro pueblo.
El tiempo y la memoria
Editorial La Esfera de los Libros