Más de 500 mujeres del movimiento feminista de todo el Estado y también una amplia representación internacional participaron en el encuentro, con el objetivo principal de asumir los retos de cara al próximo 8 de Marzo.
Tras el III encuentro estatal que se produjo en el mes de junio en Mérida con la presencia de más de 200 mujeres, el camino continúa para la construcción de otro 8M histórico. Para ello se han venido analizando por territorios las claves del éxito del pasado 8 de Marzo, así como los puntos a mejorar. De ese trabajo nace un documento de síntesis de todas las aportaciones, que sometido a un amplio debate en plenario tiene como resultado aprobar por consenso el llamamiento a una huelga feminista de 24 horas, a expensas de la celebración de la Asamblea 8M de Madrid que se reunía el siguiente lunes día 8 de octubre aprobando finalmente su adhesión a la convocatoria de huelga.
La comisión recoge el éxito de la huelga como herramienta útil para un movimiento anticapitalista y antipatriarcal como es el feminista, eso sí manteniendo como mínimo los cuatro ejes con los que se salió a la calle el pasado 8 de marzo: laboral, de cuidados, estudiantil y de consumo. Además de estos 4 ejes, la asamblea no cierra debates y deja abierto el campo a la posibilidad de incorporar otros ejes importantes como puede ser el de las violencias machistas.
Para las asistentes, aunque se parte del éxito, es importante mejorar la participación, hacer un 8 de marzo más inclusivo, para llegar a las mujeres más precarizadas y a las mujeres en mayor riesgo de exclusión y que por lo tanto tuvieron más dificultades o se vieron imposibilitadas para secundar la huelga. Por tanto, una parte importante del debate giró sobre cómo reforzar los ejes de la huelga y cómo materializar ese lema de ‘poner la vida en el centro’ en medidas concretas y tangibles.
Reunidos diez grupos de trabajo ahondan en lo que sería el corpus del contenido de las demandas del movimiento feminista.
La huelga laboral y la huelga de cuidados no están separadas, así como no lo están las esferas productivas y reproductivas. Conclusión fundamental de ambas comisiones, que coinciden en la importancia de ambos ejes y de su reforzamiento de forma coordinada. Trasladar a los sindicatos el llamamiento a una huelga de 24 horas, visibilizar los sectores laborales más feminizados y precarios, sector servicios, trabajo doméstico, mujeres sin contrato, etc., así como sumar luchas como las de las mujeres pensionistas o la denuncia de los recortes en servicios públicos son algunas de las cuestiones debatidas en el eje laboral. Conjuntamente en la comisión de cuidados se intenta llegar a fórmulas que superando el concepto clásico de huelga hagan posible que paren las que no pueden parar.
En los centros educativos
Desde la comisión estudiantil se parte de una experiencia muy positiva y se insta a continuar poniendo el foco en una enseñanza coeducativa y en la lucha contra la violencia sexual en los centros, haciéndose especial hincapié en la importancia de la impronta de la huelga en los centros educativos de primaria, sobre todo a través de la incidencia en jornadas de información al profesorado.
Ejes como el de consumo refuerzan su contenido, instando a un debate más profundo que haga tambalear las bases desde teorías como son el ecofeminismo, la puesta en cuestión de las relaciones norte-sur, las multinacionales, etc.
Además de esta articulación en cuatro ejes para conseguir que en esta convocatoria no se quede ninguna mujer fuera, se han organizado otros grupos de trabajo que pretenden dar voz a las reivindicaciones, por ejemplo, de mujeres del ámbito rural, poniendo sobre la mesa el problema del despoblamiento, la falta de servicios, las dificultades del acceso a la tierra, y la importancia de que el 8M consiga extenderse también en este ámbito.
También se ha desarrollado en este encuentro un grupo de trabajo de mujeres inmigrantes racializadas, para articular luchas, autorepresentarse y que su presencia se refleje en un 8M inclusivo e integrador.
Tras dos días de intenso debate, donde también hubo tiempo para concentrarse en la tarde del sábado en la Plaza del Parchís bajo el título ‘si nos tocan a una nos tocan a todas’, el encuentro se clausura con grandes consensos. Habrá otra huelga feminista, pero faltan por decidir muchas cuestiones. Una fundamental es si será una huelga no mixta, es decir si estarán convocadas a la misma sólo las mujeres o se hará extensiva también a los hombres. O como plantean, por ejemplo, las representantes del País Valencià, sumar a la huelga ‘ocho días de revuelta’ que hagan un 8M más potente. Estas cuestiones, tanto como la concreción de acciones unitarias, fórmulas de protesta que vayan más allá de la huelga o la actualización de contenidos y argumentarios, serán de nuevo debatidas en los espacios territoriales a los que se emplaza a trasladar sus conclusiones al próximo encuentro previsto para principios de año, aunque sin fecha ni lugar aún confirmado.
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Red Feminista Internacional… antifascista
La comisión de internacional presentó como una de las líneas maestras la intención de que este próximo 8 de marzo sea también el de seguir tejiendo una red feminista internacional, que tenga además un marcado carácter europeo y antifascista. Coincide, de hecho, este IV encuentro estatal con otros encuentros feministas en Alemania, Bélgica o Italia que debaten sobre si seguir la corriente de España.
Redacción