El principal operador saudí de telefonía, STC Group, ha adquirido una participación del 9,9% en Telefónica por un importe total de 2.100 millones de euros, según ha informado en un comunicado la compañía cuya figura clave es Mohammed bin Khalid Al Saud, miembro de la déspota familia real que dirige el país saudita. STC se convierte así en el primer accionista de la operadora.

La noticia de que un grupo extranjero ha adquirido cerca del 10% de las acciones de Telefónica, una empresa estratégica para España, ha sido comentada por la líder de Sumar, Yolanda Díaz, quien no ha dudado en cuestionar el asunto, manifestando a través de sus redes sociales que «preservar nuestra autonomía estratégica es esencial. España debe asegurar la toma de decisiones en empresas como Telefónica, guardianas de datos sensibles. Es necesaria una mejor regulación y una protección para evitar OPAs. Debemos proteger nuestro futuro digital.»

STC Group es la mayor operadora de telecomunicaciones de Arabia Saudí, controlada por la familia real. Tiene una cuota de mercado del 75% y gestiona el 90% del volumen y los datos del tráfico de Internet de Arabia Saudí. Ofrece productos y servicios en Arabia Saudí, Oriente Medio y en el norte de África. Tiene presencia en 11 países y una base de clientes de 170 millones.

Hasta ahora, los mayores accionistas de la compañía de telecomunicaciones que fue privatizada por el PP durante un gobierno de José María Aznar, eran BBVA (con un 4,87%), el fondo de inversión norteamericano Blackrock ( con un 4,48%), y CaixaBank (3,5 %).

En un sentido similar de atención a los sectores estratégicos de la economía se ha manifestado Enrique Santiago, secretario general del PCE y diputado de Sumar, que ha reclamado control público sobre dichos sectores y ha abogado por «impedir que una ex empresa pública, líder mundial en telecomunicaciones, pase a control de la dictadura feudal saudí, que accederá a información estratégica del Estado y personal de la ciudadanía».