El fin de semana del 19 al 22 de junio fue importante para la Izquierda Europea que se reunió en París. El jueves con una respuesta al NO irlandés al Tratado de Lisboa, con Eoin O’Brion del Sinn Fein quien explicó cómo frente al acoso de medios de comunicación, partidos mayoritarios de Irlanda, dirección sindical por el Sí, tras el debate, tanto las bases de los sindicatos como la población, los jóvenes, las mujeres, las organizaciones agrarias, se decantaron por el NO al constatar el retroceso social y laboral que significa este proceso de Construcción Europea. Terminó señalando que los tres NOes, el de Francia, el de Holanda y el de Irlanda son la base para construir otro Tratado.
En la misma dirección se pronunció Gabi Zimmer de Die Linke alemana, Hasan Charfo, del Partido Comunista de Bohemia Moravia, que añadió la posibilidad de que el voto comunista y el voto del Partido Democrático Cívico, bloqueen en el Parlamento Checo el Tratado, Graziella Mascia de Refundación Comunista y Vicepresidenta del PIE, que señaló la crisis de civilización que implica el actual Tratado de Lisboa, Francis Wurtz, presidente del Grupo de Izquierda Unitaria en el Parlamento Europeo que subrayó la crisis de legitimidad del actual proceso neoliberal (Directiva Bolkestein, huelga en Dacia de Rumania contra el dumping social, etc.) y Marie George Buffet, Secretaria del PCF destacó que este NO de Irlanda exige que «presionemos desde la izquierda por un nuevo Tratado Fundador de la UE redactado con y para el pueblo europeo defendiendo la democracia, un desarrollo social ecológico y solidario, la armonización por arriba de los derechos sociales, la prioridad del desarrollo humano frente a las finanzas, la reforma del Banco Central Europeo, la defensa de los servicios públicos, la igualdad de géneros, la igualdad social y la lucha contra todo tipo de discriminación, el desarrollo de energías renovables, la soberanía alimentaria con una Europa agraria, y la independencia de Europa frente a Estados Unidos, al servicio de la paz y la cooperación».
Ese mismo jueves y el viernes se reunió el grupo de trabajo de Educación del PIE, bajo la coordinación de Maite Mola del PCE, Bernard Calabuig y José Tovar del PCF, con una nutrida asistencia de 13 países. Se señaló el ataque a los servicios públicos y a la educación en concreto, las consecuencias del Proceso de Bolonia para la Universidad europea y la respuesta de los enseñantes y alumnos y la sociedad en toda Europa. Se acuerda preparar una movilización contra la mercantilización de la educación y presentar en la Universidad de Verano del PIE un cuadro de la situación por Maite Mola, Henri Wehenkel y Olivier Gebuher.
El viernes y el sábado se reunió la Presidencia y la Ejecutiva del PIE con la asistencia de presidentes y secretarios de partidos, entre ellos el del PIE, Lothar Bisky, la del PCF, Marie George Buffet, el nuevo Presidente de Synaspismos, Alexis Tsipras, de 33 años, y el Secretario General del PCE, Francisco Frutos. No asistió nadie de IU. En dicha reunión se aprobó la declaración adjunta, y se señaló la necesidad de combinar una movilización europea por el retroceso que se está sufriendo en todos los órdenes, desde la directiva de la «vergüenza» contra los inmigrantes, la directiva de las 65 horas, el intento de minimizar la voluntad del pueblo irlandés ante el proceso de construcción europea, la precariedad laboral, la exigencia de un nuevo Tratado Europeo para una Europa social, democrática, de la solidaridad y la paz, y la preparación de la campaña electoral de las europeas de 2009. En esa dirección fue la intervención de Francisco Frutos.
El Presidente del GUE/NGL, Francis Wurtz, remarcó con preocupación el conjunto de pasos regresivos que está adoptando el Parlamento Europeo en muchos frentes y la necesidad de una unidad de acción de la izquierda .
Maite Mola informó sobre la reunión entre el Foro de Sao Paulo y el PIE en Montevideo y Natasha Theodorakopoulou señaló nuestra presencia en el Foro Social Europeo de Malmö de septiembre.
Por último se vio con interés el desarrollo de la Universidad de Verano del PIE en París del día 10 al 14 de julio con temas tan candentes como precariedad, educación, inmigración, desmantelamiento del Estado del Bienestar, la lucha de las mujeres por la igualdad, los jóvenes y la precariedad, la salud y las alternativas a la actual situación.
* Responsable Europa del PCE
Extracto de la Declaración del Partido de la Izquierda Europea
Tras el No de Irlanda hace falta un nuevo proceso de construcción europea
La victoria del NO de Irlanda es una oportunidad para Europa. Y debe ser aprovechada.
El Tratado de Lisboa no puede, y no será puesto en marcha. Debía ser ratificado por los 27 países y el pueblo irlandés ha decidido que su país no lo haga. No tiene ningún sentido la voluntad de los líderes de la UE, tal como se expresaron en la reunión del Consejo del 19 de junio, de continuar con el proceso de ratificación presionando a Irlanda para que cambie de opinión. No hay solución, ni legal ni política para este Tratado.
La cuestión a plantear hoy es si hay alternativa a la situación creada: o estancamiento dentro de la crisis o nuevo lanzamiento del proceso europeo pero tomando en cuenta lo que opina el pueblo europeo.
Efectívamente hay que sacar conclusiones puesto que en los últimos años, la mayoría de las veces que se ha dado la oportunidad al pueblo europeo de expresar su opinión sobre el proceso europeo lo ha rechazado.
El pueblo irlandés no está solo. Al contrario, se ha convertido en el portavoz e interprete de la opinión del resto de pueblos europeos a los que sus gobiernos no han dado la oportunidad de expresarse en referéndum. Su voto confirma y prolonga el NO de Francia y de Holanda de 2005 rechazando de nuevo las políticas de precariedad, de presión a la baja de los salarios, de recorte de derechos sociales, de ataques a los servicios públicos, de alineamiento con la OTAN. Realmente se ha convertido en una exigencia de cambios reales en Europa. Como expresaban los oponentes al Tratado en Irlanda «Digamos NO a este Tratado para conseguir un Tratado mejor». Esta es la cuestión a debatir desde ahora.
La presidencia francesa de la UE empezará el 1º de julio. La Izquierda Europea propone que en lugar de continuar adelante de forma arrogante y ciega con la ratificación que proponen los líderes de la UE hay que aprovechar la ocasión que se ha creado para interrumpirlo y abrir un proceso de construcción europea con un nuevo Tratado de la UE. Para que pueda corresponder el Tratado con los aspiraciones y necesidades del pueblo europeo precisa descansar sobre unas bases distintas a las del neoliberalismo y militarización que han estado en el fondo del rechazo expresado en los diferentes referenda.
Se debe elaborar un Tratado de una forma totalmente nueva, a través de un proceso democrático y popular y ratificado país tras país. Las próximas elecciones europeas al Parlamento Europeo deben ser también una oportunidad de clarificar las diferentes posiciones sobre el futuro de Europa. Un nuevo texto debería ser sometido a referéndum en cada país. Proponemos que, sin más dilación se tomen iniciativas para desarrollar el nuevo texto del Tratado. Se debería redactar entre el Parlamento Europeo y los parlamentos nacionales tras una consulta con la ciudadanía con el fin de conocer cuáles son sus aspiraciones.
Son necesarios urgentes cambios en las políticas sociales, económicas, monetarias, medioambientales y de defensa. En contra de estos necesarios cambios Nicolas Sarkozy afirma su voluntad de mantener el curso de sus «cuatro prioridades» imaginando que con ello la adopción del Tratado de Lisboa sería solamente una formalidad. Seguir adelante con el dumping social en energía y en servicios públicos de transporte, con la directiva de la «vergüenza» sobre los inmigrantes, el alineamiento con la OTAN en política de defensa, las orientación de la OMC como las de agricultura, etc. Todas esas decisiones van en contra de lo que la ciudadanía europea exige para tener una Europa social, sostenible medioambientalmente, feminista, democrática, factor de paz y de solidaridad en el mundo. Una Europa de paz y solidaridad es más urgente que nunca para salir de la presente crisis.
Juntos, con todos aquellos y aquellas que lo deseen, trabajaremos para que amanezca una nueva Europa.
París a 20 de junio de 2008-06-23