El XV Encuentro del Foro de São Paulo, foro anual de los partidos de izquierda latinoamericanos, tuvo lugar del 20 al 23 de agosto de 2009 en la Ciudad de México con la participación de 520 delegadas y delegados de 32 países de América Latina y el Caribe, y 38 invitadas e invitados, representando a 63 partidos y organizaciones políticas, progresistas y de izquierda. El tema principal del Encuentro fue “las alternativas de la izquierda latinoamericana frente a la crisis capitalista”.
El relevo de Lula ocupó parte del debate, pues son los brasileños del PT los que llevan el peso mayoritario del foro, mientras que los venezolanos, bolivianos o ecuatorianos están en un segundo plano. Pero algo está cambiando, de hecho Chávez invitó para finales de septiembre de 2009 a una reunión en Caracas a los partidos de las izquierdas de América Latina.
Las coordinaciones fueron intensas en el marco del foro y sobre numerosos sujetos, primando la práctica a la teoría, observándose que la búsqueda de la protección común contra el imperialismo de EE.UU. y la UE les incita a agruparse.
El Foro São Paulo, a casi veinte años de su fundación, ha mantenido su identidad antiimperialista y antineoliberal, habiendo nacido en un momento en que el neoliberalismo parecía imponerse. Hoy esas políticas han demostrado su quiebra histórica.
En México se valoró que la profunda crisis capitalista que se desató el año pasado ha impactado en todos los países del mundo y se prevé de larga duración. Además, en América Latina y el Caribe se vive una grave crisis de seguridad pública. A ella se suman otras como la medioambiental, la energética, la de la desigualdad y la alimentaria.
Estamos ante una crisis sistémica que pone en cuestión el modelo neoliberal imperante y se produce en una etapa de máxima expansión y hegemonía del modo de producción capitalista por lo que es también una oportunidad de cambio del mundo unipolar.
Se consideró que el desenlace de la crisis abre un amplio abanico de opciones para el futuro y será resultado de dos movimientos combinados: la lucha de clases en cada país y los conflictos entre los diferentes Estados y bloques regionales. De esta interrelación pueden surgir distintos modelos económicos y políticos, unos conservadores, otros progresistas y otros que se encaminen al socialismo. En el caso de los países gobernados por la izquierda, se valora que habrá mejores posibilidades de sortear los problemas, especialmente si se hacen esfuerzos por fortalecer las economías internas y la integración regional.
Se constató que la derecha se apoya en el control de los principales medios de comunicación para desprestigiar a los partidos políticos y fortalecer a los poderes fácticos, y también se denunció la estrategia de utilizar como pretexto la lucha contra el crimen organizado para promover políticas de seguridad que militarizan a las sociedades, reducen el espacio de acción política para la izquierda, criminalizan la lucha social y promueven el temor entre la población favoreciendo acciones represivas. El Foro condenó el acuerdo entre el Gobierno de Estados Unidos y el gobierno de Colombia sobre las nuevas bases o la pretensión de imponer Convenios o Tratados de Libre Comercio que garanticen los intereses de EE.UU. y el control sobre mercados y recursos naturales.
La principal fuerza de la izquierda reside en la organización y la movilización popular, la cual se sigue expresando en toda América Latina de diversas formas, y en las que se resalta el papel de los pueblos indígenas y originarios, como en Bolivia, y en la importante lucha liberada por los pueblos amazónicos del Perú.
Más democracia, más participación y más organización social son las herramientas del cambio. Hay que profundizar la participación popular en las luchas sociales y el rescate de la gestión del Estado. También valoraron la responsabilidad de forjar y consolidar en cada uno de los países la unidad de las fuerzas políticas y sociales que están por el cambio, por el progreso, la justicia y la democracia participativa, e impulsar de manera complementaria los distintos procesos de integración, fortaleciendo las herramientas integradoras que ya existen: UNASUR, MERCOSUR, CAN, ALBA, CARICOM, SICA, etc.
Se trata de proponer la creación de nuevas reglas y de nuevas instituciones mundiales que den al mundo, y en especial a los países en desarrollo, mayor capacidad para financiar sus economías y regular el comercio, la inversión y los flujos de capital.
El foro de Sao Paulo también saludó el 50 Aniversario de la Revolución Cubana, condenando el bloqueo y reafirmando la demanda de liberación de los cinco luchadores antiterroristas cubanos. También se apoyó la lucha del pueblo hondureño por la restauración de la democracia en su país.
El Foro firmó un acuerdo entre el Foro y el Partido de la izquierda europea, para trabajar juntos en este escenario de la crisis, a través de unas políticas y unos protocolos de actuación conjuntos.
* Relaciones Internacionales del PCE. Partido de la Izquierda Europea