El pasado 20N en el teatro Quevedo de Madrid, tuvo lugar un encuentro contra la impunidad abierto a la prensa. Un acto sin duda de capital importancia para reivindicar la memoria democrática del pueblo español, coincidiendo con el 40 aniversario de la muerte de Franco.
A esta mesa acudieron como ponentes Alberto Garzón (candidato a la presidencia del gobierno por Izquierda Unida / Unidad Popular), Esther López Barceló (EU) y Julián Rebollo (Plataforma contra la impunidad del Franquismo). También estaba prevista la intervención de Marcos Ana quien por motivos ajenos a su voluntad no pudo asistir.
Se trataron temas tan presentes como la “amnesia” general que sufre nuestro país en tanto en cuanto no se están haciendo políticas para la devolución de la dignidad a todas aquellas personas que antes, durante y posteriormente a la guerra, y ya en la “transición” lucharon por los derechos y libertades en este país nuestro España.
En palabras de Alberto Garzón “en este país es más fácil ser Billy el niño que Marcos Ana, quien por luchar por la democracia pasó encarcelado más de 25 años”.
Desde IU/UP se plasma la ferviente idea de que la democracia real no es posible sin memoria; se ha de saber quién se fue para saber quién se es y cómo se construyeron las “instituciones”, obviamente, para estar en las coordenadas geográficas de una democracia de verdad encaminada a desarrollar una sociedad más justa.
“Es absolutamente imprescindible la condena del Franquismo por parte del Estado de manera oficial”. Se han de abrir las fosas para que las familias vean materializado su derecho al duelo, y al reconocimiento. Desde IU/UP se reclama transparencia en lo que a archivos de la Iglesia, policiales, del Ejército … se refiere; así como la necesidad de la investigación del robo de bebés perpetrados por la dictadura.
Julián Rebollo (familiar de víctimas del nazismo en Mathausen), junto a más de 70 asociaciones, han firmado una serie de reivindicaciones que han enviado al gobierno y partidos políticos que pasan por el reconocimiento de la existencia de 1381 fosas comunes de los asesinados durante la dictadura y el cambio de nombre de muchas calles del territorio nacional donde aún figuran nombres de torturadores y represores, algunos de ellos continúan escondidos y huidos de la justicia. Cada jueves desde hace años se reúne en la Puerta del Sol “La rueda de la Memoria Histórica”, y seguirán reuniéndose hasta la restauración de la dignidad de los olvidados y silenciados.
Según Esther López Barceló esto debería ser una cuestión de Estado al igual que en todos los países donde hubo una ruptura con los regímenes dictatoriales. “Un proyecto democrático jamás podrá sustentarse sobre fosas, añade como dato que después de Camboya somos el segundo país del mundo en número de desaparecidos, y que contraviene las resoluciones de la ONU, en la persecución de crímenes contra la humanidad, en concordancia con Amnistía Internacional y Human Rights.
El reconocido actor Juan Diego Botto en representación de “Hijos y desaparecidos y represaliados de Argentina” envió un documento que se leyó allí mismo y que hablaba de que “Todos estamos hechos de recuerdos, y que hablar de memoria no es hablar de pasado, que es hablar de presente, es hablar de identidad”.
Concluyó el evento con una ronda de preguntas a Garzón, entre otras sobre la posición de IU/UP. También de cómo reaccionar ante la crisis siria y la oleada de atentados, a lo que respondió con un rotundo NO a la guerra y explicando que la lucha contra el terrorismo se debe hacer de forma implacable pero sin vulnerar los derechos humanos.
FOSAS CERRADAS, HERIDAS ABIERTAS
A las 12 del mediodía del domingo 22 de noviembre, arrancó desde la plaza de Cibeles la manifestación contra la impunidad del franquismo.
Los asistentes a la protesta, corean al unísono “basta ya de impunidad“, ”fosas cerradas, heridas abiertas”, reclamando verdad, justicia y reparación de la dignidad para familiares y víctimas de asesinados, represaliados políticos y desaparecidos durante la ominosa dictadura.
Cayo Lara incidió en la necesidad de llevar acabo con la nueva legislatura una verdadera ley de Memoria Histórica, y que desde las aulas no sólo se debe contar que en éste país hubo una guerra civil, sino enfatizar en que ésta fue producto de un golpe de Estado contra la República, contra un régimen democrático. Se aludió también a la realidad de que la coalición de izquierdas estará siempre al lado de las víctimas, asegurando que las reclamaciones contra la impunidad se recogerán en las propuestas de Unidad Popular/Izquierda Unida encabezada por Alberto Garzón en las ya inmediatas elecciones generales.
Abarrotada ya la Carrera de San Jerónimo llena de portadores de banderas tricolor, comienza la lectura del manifiesto en castellano, catalá, galego y Euskera, exigen que se reconozca el golpe franquista como lo que realmente fue, un golpe fascista como así reconoce la Organización de Naciones Unidas. Concluyen alegando que “sin memoria no hay cambio posible” y que obviamente si no se abren las fosas las heridas no podrán cerrarse.