Ayer recibí una noticia como una puñalada. Falleció Nico Berzal, el militante más veterano del PCE Segovia e IU Segovia. Parecía que este día no iba a llegar nunca, y ha llegado en el peor momento posible.

Le conocí en mi primer acto en su ciudad. Ahí estaba, cerquita de la primera fila. Luego fuimos encontrándonos en todas y cada una de las actividades, que jamás se perdía.

Con 97 años, su vitalidad y su sonrisa eran constantes, nos interpelaban a la acción y a no rendirnos jamás. Me cuentan que hace tres semanas caminó 10 kilómetros en las marchas de las Brigadas Internacionales en Madrid. Cuando venían mal dadas (lo habitual), nos consolaba con una sonrisa: «no pudo Franco con nosotros, tampoco podrán ahora», y de nosotros emergía de nuevo la rabia eterna, el sentimiento de amor que tarde o temprano reaparece para ayudar al revolucionario a no caerse. Cuando venían bien dadas (pocas, pocas) su felicidad se hinchaba en nosotros y nos multiplicaba las energías. Nunca le faltó una palabra de cariño para cada uno de nosotros.

Nicolás nació en el molino “El Risco”, en la localidad segoviana de Aldealuenga de Pedraza, en 1922. En 1936 los fascistas asesinaron a su padre, molinero de 50 años. Su familia conoció la represión y el revanchismo: su hermano Francisco pasó por prisión, campos de concentración y batallones disciplinarios de soldados trabajadores y él mismo estuvo encarcelado unos días durante la década de los 50.

Pero nunca se rindió. Ingresó en el Partido Comunista de España en 1970, y formó en clandestinidad la primera cédula del partido en Segovia. Fue fundador de Comisiones Obreras. En las primeras elecciones democráticas tras las dictadura fue candidato al Congreso por el PCE. Por todo esto, junto a otras 12 personas, fue incluido en la «lista de sangre» de Segovia en caso de que triunfara el golpe de estado del 23F de 1981.

Entre sus muchos actos de generosidad se encuentra el hecho de que pagó, junto a otro camarada, la sede del PCE-Segovia, la misma que hoy se sigue utilizando, para asegurar que el Partido nunca despareciera.

Jamás dejó de participar en Izquierda Unida, en el PCE, y desde 2002 en el Foro por la Memoria de Segovia. Cuando coincidíamos nos hablaba de sus viajes por el mundo, de sus lecturas, de su afición a ver TeleSur para conocer la verdad en un mundo cada vez más manipulado. En una Fiesta del PCE estaba ilusionado por conocer a la madre de Alfon: quería apoyarla económicamente. Conseguimos que se encontraran y se fundieron en un abrazo. Así era Nico.

Esperaba verle en el Villalar que no existirá.

Buen viaje, camarada Nico. Agapito te recibirá con una rondalla.

ExCoordinador de Izquierda Unida de Castilla y León