Daniela Pizarro. Hugo Guzmán. Patricia Ryan. Yani Aguilar. Carmen Mendoza. Igor Mora. Santiago. 15-18/10/2021. Nadie duda que el 18 de octubre de 2019 fue el hito que marcó que “Chile despertó”. Es la fecha de la revuelta social que duró unos cuatro meses y que comenzó el 7 de octubre cuando las y los estudiantes secundarios saltaron los torniquetes del Metro por el alza de 30 pesos en el pasaje. Pero se dijo que la protesta popular no era por 30 pesos, sino por 30 años de injusticias, abusos, desigualdades, incomprensiones.

Lo ocurrido es para no olvidar. Para mantener en la memoria las claves de lo que pasó el 2019. Lo protagonizado, sobre todo, por el movimiento social y la sociedad civil. Porque, en lo mínimo o lo máximo, la revuelta social activó situaciones como el proceso constituyente para tener una nueva Constitución. Mostró el enojo pero también la rebeldía del pueblo, el estado de conciencia y reacción, la capacidad de organización, convocatoria, creatividad y movilización.

Se dice que a través de la prensa se va construyendo la historia más viva. A dos años del levantamiento popular, que durante meses de 2019 e inicios de 2020 se extendió por las 16 regiones del país, con participación directa de unos cinco millones de chilenas y chilenos, en ElSiglo.cl recogemos información que hace dos años fueron publicados en la edición impresa del periódico.

Algunos episodios y protagonistas

-El 7 de octubre se produjo la primera evasión del pago de pasaje en Metro, con cientos de estudiantes secundarios saltando los torniquetes, sobre todo en las estaciones céntricas del tren subterráneo. Esto se extendió hasta el 14/O. El alza del pasaje fue impuesto por la Comisión Técnica y el 20/O el Gobierno tuvo que echar marcha atrás en la subida del boleto.

-El viernes 18 de octubre, principalmente en Santiago, cientos de miles de personas salieron a las calles, avenidas, plazas y espacios públicos y comenzaron a protestar, interrumpiendo las actividades normales y generando una situación de movilización masiva en todas las comunas de la Región Metropolitana. Al atardecer, la protesta fue replicada en decenas de ciudades de Chile.

-La cifra de gente movilizada el mes de octubre osciló entre 3 millones 500 mil y 4 millones de personas.

-Hubo protestas en las 16 regiones, en al menos 280 de las 346 comunas.

-Se movilizaron estudiantes, mujeres, pobladores, adultos mayores, artistas e intelectuales, trabajadores, pensionados, profesionales, indígenas.

-El 25/O se efectuó “la marcha más grande de Chile” en Santiago. Fueron dos millones de personas. En esos días hubo marchas multitudinarias en Valparaíso, Viña del Mar, Concepción, Antofagasta, Punta Arenas, Temuco, Valdivia. El 30/O se realizó la Huelga General a nivel nacional.

-A fines de octubre se inician los cabildos ciudadanos en plazas, parques y espacios públicos. La gente comienza a participar en sus barrios y comunas. Es considerado un hecho tan inédito como significativo.

-Al Gobierno se le rompió la agenda. Sebastián Piñera llegaría a estar entre el 4 y el 6 por ciento de aprobación, la más baja en la historia del país. Tuvo que guardar su programa y encarar una nueva realidad y una agenda impuesta por el movimiento social. Se le rompió el “círculo de hierro”: tuvo que sacar a los ministros de Interior, Hacienda, Economía, Secretaria General de Gobierno y Trabajo.

-El 30/O desde La Moneda se informó que debido a la revuelta y su impacto, se suspendía la Cumbre APEC y COP25, que fue una feroz derrota de la política exterior de Piñera.

-El Gobierno, desde el inicio de la revuelta social decretó el Estado de Emergencia, el Toque de Queda, sacó a los militares a la calle, salieron a los menos 28 mil elementos de las Fuerzas Armadas. Piñera declaró: “Estamos en guerra”.

-El 15 de noviembre un grupo de partidos políticos de la ex Concertación, el Frente Amplio y la derecha, llegaron a un acuerdo político para enmarcar el proceso constituyente. Luego vendría una ofensiva social por una nueva Constitución, con Asamblea Constituyente y cuestionamientos a los amarres de esos partidos.

-Los estudiantes secundarios fueron los protagonistas del inicio y desarrollo de la revuelta social, desde la primera semana de octubre rechazando el alza de pasajes en el Metro, saltando torniquetes, realizando marchas y enfrentándose con Carabineros. “Evade” se instaló como palabra clave de la protesta. En los meses de 2019 fueron “primera línea” en las protestas.

-Las mujeres jugaron un papel protagónico en el estallido social. Muchachas secundarias y universitarias, pobladoras, artistas, trabajadoras, feministas, fueron parte de la evasión, el cacerolazo, cabildos y asambleas. La sonoridad femenina se instaló con fuerza y amplitud, sobre todo con la intervención “Un violador en tu camino” del colectivo Las Tesis. Unas diez mil mujeres llegaron a las inmediaciones del Estadio Nacional para realizar la intervención de Las Tesis y decenas de miles estuvieron en marchas feministas.

-La creatividad, organización y decisión de amplios sectores sociales, dieron paso a grupos de salud y defensa definidos como “La primera línea”, “Los capuchas”, Movimiento de Salud en Resistencia, Defensoría Popular, y se generó una coordinación de medios alternativos y populares.

-Se llegó a calcular que durante octubre de 2019 participaron unas 20 mil personas en cabildos ciudadanos y esa suma se alzó a unas 200 mil personas al finalizar el año, con cabildos y asambleas en cientos de barrios y comunas de todo el país. Se efectuó la Consulta Ciudadana Municipal, donde votaron más de 2 millones de chilenas y chilenos, en 225 comunas, y que ratificó que la mayoría de la población quería una nueva Constitución.

-Los medios sociales, comunales, alternativos y populares jugaron un rol principal en informar, comunicar y analizar todo lo que ocurría, inclusive con efecto internacional en la entrega de mensajes. La actividad de medios populares se dio en casi todo el país, desde espacios barriales, comunales, regionales y nacionales. Hubo un espacio de articulación en la que participaron Revista DeFrente, Telesur, El Ciudadano, Le Monde Diplomatique-Chile, Canal 3 La Victoria, El Siglo, entre otros.

-“Unidad Social” fue un espacio de organización y representación que jugó un alto papel en medio de la movilización social y sindical. Logró aglutinar a más de 150 organizaciones sindicales, sociales, feministas, indígenas, campesinas, profesionales, estudiantiles, culturales, de derechos humanos, poblacionales, de pensionados. “Unidad Social” fue el conglomerado que convocó a paros nacionales y huelgas generales que movilizaron a cientos de miles de asalariados y levantó demandas laborales como que se fijara en 500 mil pesos el salario mínimo, se terminaran las AFP y se garantizaran empleos decentes y dignos.

El canto popular

Hubo una explosión espontánea de diversidad de manifestaciones de cultura popular. Irradiaron los murales, las pinturas, los rayados, la gráfica, el canto, las consignas, los “memes” y la voz en redes sociales, y el recuerdo y presencia de Violeta Parra (“Gracias a la vida”) y Víctor Jara (“El derecho a vivir en paz”).

La gente entonó y se movió con “El baile de los que sobran” de Los Prisioneros, “El pueblo unido” de Inti Illimani, y temas de Quilapayún, Sol y Lluvia, Los Tres, Villa Cariño.
En la Plaza Chabuca Grande de Recoleta se desarrolló el “Cacerolazo cultural por la constituyente” donde participaron destacadas bandas musicales como Illapu, Villa Cariño, Moral Distraída, Gianluca, Princesa Alba, Camila Moreno, entre otros.

Se desplegó el “Acto cultural por el Derecho a Vivir en Paz” en el Parque O’Higgins donde se presentaron artistas y grupos musicales como Camila Moreno, Gepe, Pedro Piedra, Cami, Alex Anwandter, Francisca Valenzuela, Nano Stern, Illapu, Villa Cariño, Moral Distraída, Tomo como Rey, Princesa Alba, Gianluca y Gordi junto a Cease.

En la Plaza de Armas de Quilicura se realizó un cacerolazo cultural donde participaron Manuel García, Francisca Valenzuela, Los Tres, Los Jaivas, Drefquila, Fernado Milagros y otros artistas.

En el Teatro Caupolicán se efectuó el festival “Todas las voces” donde actuaron: Quique Neira, Denise Rosenthal, Moral Distraída, La Transa, Shamanes Crew, Liricistas, Villa Cariño, La Pozze Latina, Talulah Neira, Tomo como Rey, Mamborap, Tata Barahona y Los Sudacas Domineros, El Bloque 8, Fusión Humo.

En el zócalo de la Municipalidad de Recoleta se realizó la actividad “Comediantes en marcha”, donde 24 destacados humoristas se sumaron a las demandas sociales y culturales. Jorge Alís, Stefan Kramer, Pamela Leiva, Javiera Contador, Pato Pimienta, fueron algunos de los que estuvieron.

El “Festival de la Asamblea Constituyente” se realizó en Puente Alto, donde asistieron miles de vecinas y vecinos para ver a bandas como Sol y Lluvia, la Combo Tortuga, Chysteme, y otros.

La Plaza de los Sacramentinos fue escenario de una de las actividades más sentidas. “El réquiem de Mozart para las víctimas de la violencia estatal” fue organizado por un coro y músicos sinfónicos autoconvocados. En la actividad además se entonó “El derecho a vivir en paz” y “El pueblo unido”. La misma actividad se desplegó en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.

La Plaza Juan XXIII albergó el evento “Que no nos callen” donde los grupos Los Tres y Los Jaivas tocaron juntos por primera vez. En el escenario además se presentaron Princesa Alba, Fernando Milagros y Pedro Piedra.

En el frontis del Museo de Arte Contemporáneo se hizo durante semanas el “Debate canino” donde se reunieron intelectuales y artistas para reflexionar sobre las razones de las movilizaciones. La idea fue del colectivo cultural Tres Tristes Tigres y participaron figuras como la artista plástica Laura Estévez, el poeta Sebastián Herrera, el cineasta Fernando Guzzoni, el poeta Raúl Zurita y la psicóloga Constanza Michelson.

No fue el único caso. Durante los meses de la revuelta social surgieron temas como “Cacerolazo” de Anita Tijoux, “Plata Ta Tá” de Mon Laferte y Guaynaa, “Que se vayan los pacos” de Combo Chabela, “La caravana” de Kuervos del Sur, “Luz de rabia” de Tata Barahona, “Atte. Los chilenos” de Fletcher, “30 pesos” de Desmak, “Regalé mis ojos” de Nano Stern. Alex Anwandter estrenó la canción “Paco vampiro”.

La revuelta en regiones

No existió un catastro rígido. Lo claro es que hubo cacerolazos, marchas, movilizaciones, protestas, cabildos, asambleas, actividades culturales y encuentros ciudadanos en las 16 regiones del país. Todos los territorios movilizados. De acuerdo a cifras mostradas por organizaciones sociales y vecinales, la prensa, Carabineros, Municipalidades, en regiones a lo menos participaron cuatro millones de chilenas y chilenos en las jornadas de revuelta social.

Los datos y testimonios de todo tipo, marcaron un precedente de movilización regional comparable a las protestas que llevaron al fin de la dictadura a fines de los años ochenta. La gente en comunas y ciudades de regiones salió a las calles, copó espacios, colmó arterias, participó en centenares de cabildos.

La protesta popular regional estuvo concentrada en cientos de comunas de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins, Maule, Biobío, La Araucanía, Los Ríos, Los Lagos, Aysén y Magallanes.

En Arica y Parinacota hubo marchas y manifestaciones que coparon avenidas y barrios y espacios como la Rotonda Tucapel y el Paseo 21 de Mayo. En Visviri se reportó una significativa manifestación, como la de personas con discapacidad en el centro de Arica. Hubo actos en que concurrieron unas 20 mil personas. En Antofagasta se registraron desde el 18/O y semanas consecutivas al menos seis grandes movilizaciones y en Tarapacá hubo protestas masivas en lugares como Tocopilla, ruta de Pozo Almonte, Alto Hospicio y Collahuasi. En Atacama hubo revuelta social principalmente en Copiapó, Caldera, Vallenar y Chañaral, con participación de miles de personas. Coquimbo tuvo manifestaciones en diversas comunas, estudiantes del Liceo Leonardo Da Vinci hicieron una actividad en homenaje a las víctimas de la represión, y destacaron actividades en La Serena, Salamanca e Illapel. Hubo una masiva marcha entre Valparaíso y Viña del Mar, se efectuaron decenas de movilizaciones en esta región, y cientos de personas fueron parte de la protesta social en la Isla Robinson Crusoe y el Archipiélago Juan Fernández.

O’Higgins registró marchas en Rancagua, Graneros, Mostazal, Rengo, Pichilemu, Nancagua, San Fernando y Santa Cruz. En Maule se reportó una gran manifestación en la Plaza La Loba en Talca, y movilizaciones con miles de personas en Curicó, San Rafael, Linares y Parral. En diversas zonas de la región del Biobío se movilizaron decenas de miles de personas en avenidas y espacios públicos de muchas comunas, en calles céntricas de Concepción y en La Araucanía también hubo protestas en varias comunas, en zonas indígenas y en lugares como Mininco, Collipulli, y áreas campesinas. En Los Ríos, hubo concentraciones masivas principalmente en Valdivia, con alta participación de universitarios, trabajadores y mapuches. En Los Lagos, se informó de multiplicidad de actividades en Puerto Montt, Osorno, Calbuco, Castro, Quellón, Ancud, Río Bueno, La Unión, Futrono, Achao, Isla Quinchao y Lliftén. Varias movilizaciones se registraron en Coyhaique, Puerto Cisnes, Puerto Aysén, Chile Chico, en la región de Aysén. En Punta Arenas, Magallanes, hubo revuelta social protagonizada por miles de personas, y se reportaron acciones en Porvenir, áreas de Tierra del Fuego, Puerto Williams y Puerto Natales.

El cacerolazo

El histórico proceso de movilización que prendió en 2019 tuvo como una principal forma de manifestación popular, el cacerolazo, desde ventanas, patios, balcones, calles, plazas, departamentos y casas. Muchas de las manifestaciones fueron un simple y ruidoso cacerolazo. Oído en todo el país, en cada rincón. Las ollas no dejaron de sonar en marchas y actividades.

En espacios públicos, en el barrio alto, en barrios populares, en comunas de todo el país, en movilizaciones, las ollas y las cucharas de palo fueron protagonistas indiscutidos.
Por eso, a pocos días del estallido social, la compositora de música urbana, Anita Tijoux, lanzó el hit “Cacerolazo”. La canción fue acompañada de un video con un compilado de imágenes de caceroleos y de represión. En pocas líneas la artista explicó las razones que tiene el pueblo para manifestarse frente a un Gobierno que como respuesta solo propuso la militarización. “Cuchara de palo frente a tus balazos y al toque de queda cacerolazo”, dice la canción. “Voy a hacer un apañe con lo que mejor sé hacer: música”.

La violación amplia y sistemática de los derechos humanos

A lo menos seis organismos chilenos y extranjeros de derechos humanos denunciaron la violación masiva de derechos humanos desde octubre de 2019.

Las primeras cifras, luego confirmadas, establecieron 23 muertos, más de dos mil heridos, 400 lesionados oculares, seis mil detenidos, abusos y golpizas de parte de Carabineros y militares.

Se llegarían a más de dos mil querellas contra agentes del Estado por violaciones a los derechos humanos y crímenes de lesa humanidad. En 2020 el propio Sebastián Piñera, ex ministros del Interior y generales de Carabineros fueron sometidos a un proceso judicial por esos motivos.

“Piñera, no nos quites los ojos” fue una consigna instalada en todo Chile, ante el medio millar de hombres y mujeres víctimas de lesiones y amputación ocular, producto de un nuevo estilo criminal de la represión ejercida por Carabineros: disparar bombas lacrimógenas, perdigones y balines a los rostros de los manifestantes. El estudiante Gustavo Gatica y la trabajadora Fabiola Campillai quedaron ciegos por disparos hechos por uniformados identificados y procesados por su acción criminal.

A fines de 2019, un reporte del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) mostró que hubo 3 mil 461 personas heridas, de ellas 256 niñas, niños y adolescentes. Hubo mil 986 heridos por armas de fuego y mil 555 por perdigones; 357 personas con heridas oculares, 16 con estallido ocular, 7 con pérdida ocular y 121 con trauma ocular; 819 casos comprobados de uso de fuerza excesiva en detenciones, 269 denuncias por apremios ilegítimos, 194 episodios de acoso-violencia sexual y 174 desnudamientos provocados por agentes del Estado.

El Ministerio de Salud informó de 12 mil 738 atenciones médicas producto de las movilizaciones y la represión, y la Oficina de Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) indicó en diciembre de 2019 que había recopilado información de 133 actos de tortura y malos tratos por parte de Carabineros y las Fuerzas Armadas.

El Ministerio de Justicia informó de 28 mil 210 detenidos durante el período de manifestaciones ciudadanas.

Desde el INDH se reportaron 166 casos de violencia sexual, 59 mujeres, 28 niñas y adolescentes, 28 hombres y 27 niños y adolescentes.

Fuente: elsiglo.cl