El gigante textil tomaba como base los convenios provinciales del sector del comercio textil, en noviembre de 2022 estos convenios solo estaban en vigor en 24 de las 52 provincias y 13 iban a vencer en 2023. El más antiguo es el de La Rioja, de 2008. Una vez más, la patronal había usado la táctica de bloquear convenios para congelar salarios. Excepto Gipuzkoa, Araba, Pontevedra, Illes Balears, Ciudad Real y Guadalajara, todas las dependientas tenían salarios que partían de una horquilla inferior al SMI de mil euros, si trabajaban a jornada completa. En la parte alta de la horquilla de tablas salariales para ayudantes de dependientas y dependientas, los convenios de Ávila, León, Murcia, Lugo, Lleida, Huelva y La Rioja ni siquiera alcanzaban al SMI

Un autentico despropósito por parte de una empresa que registró un beneficio neto de 3.095 millones de euros durante los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal 2022-2023 (entre el 1 de febrero y el 31 de octubre), lo que ha supuesto un aumento del 24% respecto a un año antes. Esta situación creó un malestar entre las trabajadoras de las tiendas que se materializó en la convocatoria de varias huelgas: la más conocida ha sido la de A Coruña, la más larga fue la de Gipuzkoa. Las primeras ahora cobran 1.402 euros mensuales (21.030 euros anuales), más los pluses. Las segundas, 1.407 euros, más el plus de digitalización (100 euros) y el resto de complementos.

Con el acuerdo firmado, el cual se ha calificado como histórico, se fija un salario mínimo garantizado de 18.000 euros brutos anuales para las empleadas con menos de 18 meses en la empresa, de 20.000 para las que llevan entre 18 y 48 meses y 22.000 para una antigüedad superior a cuatro años. Las responsables cobrarán un mínimo de 24.500 euros. El salario será proporcional a la jornada contratada. Esto se traduce en que la mayoría de las 36.000 trabajadoras de las tiendas percibirán un aumento salarial de “entre el 20 y el 40%” en la próxima nómina.

Estos nuevos sueldos se abonarán con efecto retroactivo desde el 1 de enero de 2023 y se irán revalorizando en 2024 y 2025 en función de la evolución del IPC del ejercicio anterior. A estas cantidades se suman otros conceptos vinculados a la antigüedad, así como todos los variables (comisiones, incentivos, nocturnidad) que aparezcan en cada convenio colectivo provincial de aplicación y los pluses o complementos que abona Inditex y no aparecen en el convenio colectivo de aplicación, en los territorios que los tengan. Además, la compañía aumentará las comisiones de venta a un porcentaje mínimo del 1,4% para todas las marcas. En cuanto al incentivo anual, todas las dependientas cobrarán en las nóminas de febrero de 2023 y de 2024 un extra de entre 600 y 1.000 euros, según su jornada laboral.

Aparte de la tabla salarial, el acuerdo pactado con CCOO y UGT incluye para toda la plantilla una serie de ayudas sociales que ya estaban en vigor en algunas provincias. Se trata de 450 euros por nacimiento de hijo y un extra de 170 euros al mes por hijo para la guardería o el comedor. Además, se contempla una ayuda de 200 euros al año para gasto en material escolar de niños de entre 3 y 18 años y de 500 euros para los hijos de empleados que estudien en la universidad.

En cuanto a horarios, se establece que los domingos y festivos que sean fuera de la jornada ordinaria o voluntarios se abonarán a 12 euros la hora más una hora libre o 24 euros la hora, a elección de la persona trabajadora. En el caso de ser una jornada ordinaria en domingo, la remuneración será de 10 euros la hora. Se intenta así poner coto a una practica utilizada por la empresa, que ha consistido que en los últimos años hacían contratos de lunes a domingos, que contemplaban el domingo como un día laborable ordinario.