El XII Congreso del PSUCviu, a celebrarse en Barcelona los próximos 15 y 16 de mayo, parte de dos premisas. Una, la necesidad de un proyecto como el PSUCviu dado que persiste la injusticia social y la experiencia demuestra que existe una ‘masa social crítica’ con la que es posible trabajar en el objetivo de transformar la sociedad, es decir, sigue vigente el proyecto comunista. Dos, «nuestra prioridad actual debe ser la consolidación y fortalecimiento del PSUCviu», tal y como reza en el documento previo de discusión.

En el mismo, se hace una mención expresa a la relación con EUiA en el último periodo y las dificultades por las que atraviesa. «La actitud, en reiteradas ocasiones, de exclusión por parte de la actual mayoría de EUiA ha generado incomodidad a muchos de nuestro militantes a la hora de trabajar». No obstante, reitera que «EUiA es un proyecto político del PSUC». En cuanto al Gobierno tripartito catalán y la participación del partido en el mismo, se busca la conjunción entre la izquierda parlamentaria y la izquierda social: «Somos un partido de lucha y de gobierno», afirma.

Este último punto tiene, a su vez, bastante que ver con el proyecto de crear un Polo Alternativo en Cataluña como una propuesta anticapitalista y unitaria, con enfoques en lo cultural, social y político. Ante la estrategia de una alternancia de los partidos políticos en el Gobierno catalán, el PSUCviu prefiere articular una alternativa con raíces sociales, económicas y con representación parlamentaria, que sea amplia para atraer a los movimientos social, con un planteamiento mínimo común, sobre todo en lo social. Este Polo se asentaría sobre dos puntos: la voluntad de unidad de todas las fuerzas de izquierda para hacer frente al sistema capitalista y la voluntad de estar tanto en la calle como en las instituciones.

Es clave saber qué tipo de Partido se busca y aquí las directrices son: un PSUCviu fuerte, organizado, con participación activa de los militantes y que esté presente en todos los ámbitos de lucha y de gobierno en busca de la transformación social. Los instrumentos de trabajo han de propiciar un mejor funcionamiento organizativo, una mayor visualización externa, una mayor presencia política, incremento de la afiliación, etc.

En esta ‘guía para el debate’ se señala que el socialismo es la mejor solución a la crisis del capitalismo. El concepto de socialismo (y de comunismo) ha sido atacado tanto desde posiciones conservadoras como desde las socialdemócratas, que reivindican que el socialismo renuncie a la transformación del sistema capitalista. «Redefinir el socialismo implica asumir la igualdad de oportunidades en lo social, asumir la sostenibilidad como criterio inexcusable, situar en el centro del sistema social la majora de las condiciones de vida de las personas, la calidad de vida y no la producción por la producción, asumir un sistema de gestión plural sobre un estado democrático representativo del conjunto de la ciudadanía».

Otro de los grandes debates del momento, dada la cercanía de los comicios europeos del 13 de junio, es Europa y la configuración del Partido de la Izquierda Europea, donde se apunta como «una organización plural que estructure a comunistas, ecologistas y socialistas revolucionarios. Su fin es el de conformar un nuevo tejido, pero no sobre un proyecto que sea la pura suma de las organizaciones preexistentes, sino sobre la sintonía en la práctica política en un marco común y la articulación de un programa que supere los errores del pasado».