El sábado 23 de febrero, el Salón de Actos del Centro «Abogados de Atocha», en Madrid, se quedó pequeño para acoger a todos los asistentes que quisieron participar en la jornada de reflexión y debate celebrada a lo largo de todo el día. La jornada estuvo protagonizada por tres mesas de discusión, dedicadas a los movimientos sociales, al mundo académico y de la cultura, y al mundo jurídico.

Los abogados de la Plataforma explicaron que existen suficientes bases jurídicas para que Aznar rinda cuentas ante la justicia por su responsabilidad en la guerra de Iraq y en el 11 M (MO publicó en el último número una amplia entrevista con el abogado Lluis Orri explicando todos los detalles) y presentarán una querella en las próximas semanas.

Julio Anguita, Paco Frutos y Antonio Romero, fueron algunos de los participantes que compartieron mesa y jornada con miembros destacados de los movimientos sociales y del mundo de la cultura como Carlos Taibo, Javier Sádaba, Waleed Saleh, Jordi Dauder, Susana Oviedo, Juan Iglesia, entre otros.

Antonio Romero, breve y pragmático, basó su intervención en la idea de que «la impunidad se abrirá camino ni no actuamos. Pero si actuamos lo que se abrirá camino es nuestra causa» y llegó cargado de datos sobre el negocio de la guerra de Iraq, las bases americanas y los vuelos de la CIA. Explicó que sin las 132 bases militares que Estados Unidos tiene repartidas por el mundo, incluida España, ese país norteamericano no podría hacer guerras como la de Iraq. Allí Estados Unidos empleó 54.750 millones de dólares en gasto bélico. La cifra se relativiza al compararla con los ingresos anuales del primer fabricante de armas:19.400 millones de dólares. Respecto a los vuelos de la CIA, aportó los datos de los aviones que, haciendo escala en bases norteamericanas en España, como la de Morón de la Frontera, llevaron cerca de un centenar presos a Guantánamo. Y es precisamente con Aznar cuando se flexibiliza el control de los aviones que hacen escala en Morón de la Frontera o en Rota.

Por eso, y en su propósito de pasar de las palabras a los hechos, están trabajando para que comparezcan por su implicación en los vuelos de la CIA, los directores de AENA, los ministros de Fomento, Exteriores y Defensa de los dos últimos gobiernos -el del PP y el del PSOE-, además de los directores del CNI.

Paco Frutos, como Secretario General del PCE, recordó que la idea de crear la Plataforma Juicio a Aznar nació en un Comité Federal del Partido, en febrero de 2007, a raíz de la desfachatez de las declaraciones emitidas por el ex presidente del gobierno intentando engañar al pueblo al decir que nadie sabía que no había armas de destrucción masiva, y quedarse tan fresco. También explicó que esa es parte de la actitud del PP que pretende hacernos sentir que la guerra de Iraq es una guerra del pasado «y no es así» sentenció Frutos: «Hablar de la guerra de Iraq no es hablar del pasado sino de cientos de miles de muertos, de heridos, de exiliados, de la devastación de un país, de su destrucción». En este punto criticó la desmovilización general y preguntó: «¿dónde : están ahora las fuerzas de la cultura, los partidos, los sindicatos, todos los que se movilizaron, cuanto hoy todo el horror y la destrucción continúan igual?». Frutos recalcó la necesidad de continuar presionando «porque cuando no hay presión social e iniciativas, las instituciones jurídicas y políticas siempre deciden lo más conservador. Por último, el secretario general del PCE quiso dejar claro que cuando se habla del enriquecimiento de Iraq, se trata del enriquecimiento de unos pocos, que principalmente son las empresas norteamericanas, ya que el resto de la población vive en la miseria y el miedo y subrayó que no hay que confundir el terrorismo que ha sembrado allí Estados Unidos con la heroica lucha de resistencia que el pueblo iraquí mantiene en defensa de su independencia contra los ocupantes.

Julio Anguita, ex coordinador general de IU, no quiso faltar a la cita que ofreció la jornada de reflexión y debate. Dijo que participaba no sólo para mostrar su apoyo a la Plataforma, sino para renovar el compromiso de futuro. Explicó que si bien el primer objetivo es intentar sentar a Aznar en el banquillo, como un derecho que nos ofrece la Declaración Universal de Derechos Humanos también se pude hacer, de acuerdo con el artículo 28 de dicha declaración, que se sienten Blair, Bush y Barroso. Pero no hay que quedarse hay: «Nuestras acciones no pueden ser flor de un día, sino que tienen que servir para una conciencia social alternativa y militante de la legalidad y del Estado de Derecho».