Son las 20.14 horas, Madrid. Acabo de pasar por debajo del puente que está cerca del Senado y del Palacio Real. Los pobres, rumanos creo, duermen bajo mantas en la cera que no está mojada. Frío, cada día más. Llevo en la cabeza la suntuosa de la puerta del Teatro Real que ofrece hoy algo de Mozart. La sinfonía de la ciudad es otra.

Antes, sobre las 19.05 me llama Gloria Aguilar. La cosa sigue igual.

Y sobre las 20.20 me dice Isaac Rosa que le dicen que ha muerto. Los mensajes de despedida son imprevisibles y parecen lo que no es. Dudas.

Voy dando saltos en el tiempo y me veo junto a Marcos Ana en la fiesta del PCE. Como siempre con su humildad altiva, de hombre de respeto y contundente contra la explotación. Se me viene a la cabeza Marcelino Camacho…los días que llueve en Madrid, hay siempre una despedida. El cielo va llorando, pero sin prisa.

Hace dos días. Majadahonda, martes 22, 19.57 horas. Lucía Sócam canta un poema dedicado a Fidel Castro de Blas de Otero. Se levantan dos energúmenos. No es la primera vez que la mandan para Cuba, como si eso fuera un castigo. Lucía termina la canción sin parar, el público la apoya con un aplauso enorme. Y para seguir no duda en cantar el poema dedicado a Marcos Ana de Blas de Otero. Ya sabíamos de su estado. La viuda de Blas de Otero, Sabina, contempla el espectáculo que han dado los fachas. Todo sigue.

“No hablo por hablar, escribo hablando, sencillamente como en un cantar de amigo, Nazim Marcos… compañeros en la libertad más bella” me vienen los versos.

Desde hace unos días a hoy. Las horas. Los minutos. Los silencios pesan. Los versos pasan.

Málaga, martes 22. 23.05 horas. Aitana Alberti León en la cena, después de la presentación de su antología recuerda que Marcos Ana era casi el único que visitaba a su padre ya mayor. Lo recuerda con cariño y con el sabor de las aceitunas, que Marcos recomendaba comer por la mañana. Lo recuerda tanto. También la visitaba en La Habana y le traía noticias de España.

Yo aún recuerdo… Fiesta PCE 2010, San Fernando de Henares. Emma Cohen sorprende en el homenaje a Miguel Hernández y recita Mi corazón es patio de Marcos Ana. Se levantó el poeta llorando. Todas y todos aquel día aprendimos más… Emma se despidió con el saludo anarquista. Se envolvió el ambiente de banderas rojas.

20.36 horas. Madrid. Alberto Garzón ha visitado a Marcos Ana, sigue luchando. El rumor era falso.

20.45 horas. Sigo en Madrid, mañana queda un día largo.

20.47 horas. Decido no mirar más el reloj.

Quisiera cerrar los ojos, parar el tiempo, improvisar que mi cabeza queda ordenada. Marcos Ana pelea por su vida.

No habrá hora para su hora.

No habrá cementerio para su lucha.

Te amamos. Todos los pueblos del Mundo que te conocen, te aman.

21.30 horas. Un escueto mensaje, como dardo, de Gloria, avisa de la muerte de Marcos.

Nos enseñaste a amar. A ser revolucionarias y revolucionarios.

Todavía estamos aprendiendo y para eso, tienes razón poeta, ya es la hora, que despertemos para siempre.

¡Fuerza, camarada!