La extrema derecha peruana sigue conspirando contra el presidente Pedro Castillo pero la derecha menos agresiva prefiere manejar por ahora la opción de negociar con el gobierno para contener las reformas progresistas.
Con 64 votos a favor, 58 en contra y 2 abstenciones, el gobierno del Primer Ministro Aníbal Torres ha conseguido la aprobación del Congreso después de un intenso debate en el que se han acumulado las críticas contra este nuevo gabinete, el cuarto del mandato presidencial de Pedro Castillo.
A pesar del voto de confianza para el gobierno, la extrema derecha va a intentar de nuevo conseguir los apoyos necesarios para plantear la destitución parlamentaria del presidente. Supuestamente la moción contaría ya con el voto de 50 diputados pero necesita dos más para que sea tomada en consideración y se someta a debate. El primer intento de destitución se produjo en noviembre del año pasado. Ahora se abre de nuevo la incertidumbre en torno al golpe parlamentario porque la legislación peruana permite a una mayoría de la cámara anular la elección presidencial del voto popular.