El líder de los y las comunistas de la República moldava de Transnistria, Oleg O. Jorzhan, ha sido hallado muerto con signos de violencia en su domicilio en la localidad de Sucleia el pasado 17 de julio. «El cadáver de Oleg Jorzhan fue encontrado por su esposa en una de las habitaciones», señalaba la nota oficial.
La noticia ha sido confirmada también por el Secretario General del Partido Comunista de la Federación Rusa, Guennadi Ziugánov. «El líder del partido comunista de Transnistria, Oleg Jorzhan murió anoche. Le mataron en su casa, exigimos iniciar de inmediato una investigación», dijo Ziugánov en una rueda de prensa en Moscú.
Oleg O. Jorzhan era el presidente del Partido Comunista de Transnistria y el principal dirigente de la oposición. Jorzhan fue un militante comunista que nunca aceptó la ilegal partición de la Unión Soviética, y que llevó a expresar en las calles, desde la clandestinidad, y en el Parlamento, su convicción de que las antiguas repúblicas soviéticas debían hermanarse de nuevo. No ha podido verlo. La represión que asola Moldavia y buena parte de la Europa oriental, que llevó a Jorzhan a sufrir cuatro años de cárcel, se ha cobrado ahora su vida, la existencia de un ejemplar y digno militante comunista que siempre luchó por la libertad y la justicia.
El PCE denuncia el asesinato
Jorzhan ha sido la última víctima de la revancha anticomunista que asola a Moldavia y que ha recibido el apoyo y el estímulo de gobiernos ultraderechistas y de Washington. «Toda Europa oriental se ha convertido en un campo de minas y de odio a causa de la expansión de la OTAN, que encendió la guerra en Ucrania en 2014 tras el golpe de Estado del Maidán y que sigue ensombreciendo el futuro del continente. Gracias a la complicidad de los gobiernos de extrema derecha en Moldavia, Estonia, Letonia, Lituania y Ucrania, la represión contra los comunistas no ha cesado, y permite las manifestaciones públicas de destacamentos de veteranos de las Waffen-SS con apoyo gubernamental, y operaciones de acoso y agresión de grupos nazis contra los comunistas y la izquierda como se ha visto en la reciente celebración del aniversario de la victoria sobre el nazismo en 1945″, señala el Partido Comunista de España en un comunicado.
Además desde el PCE denuncian que en Ucrania la represión ha llegado tan lejos que dirigentes comunistas como los hermanos Kononóvich, hoy en reclusión domiciliaria, han recibido amenazas de muerte de la propia policía, y se han confirmado los indicios de la existencia de «escuadrones de la muerte» (a semejanza de los creados por el Mossad israelí para asesinar a palestinos) que dependen del propio Ministerio del Interior.
Ante esta situación, el Partido Comunista de España ha denunciado el asesinato de Jorzhan, exigido a las autoridades del país una rápida investigación para detener y juzgar a los integrantes del comando fascista. Pide también al gobierno español y a la Unión Europeo que exijan urgentes explicaciones sobre el crimen, sus autores y sus cómplices, y hace «llegar a los camaradas del Partido Comunista de Transnistria y los familiares de Jorzhan sus condolencias», concluye el comunicado.
