Las sedes del Partido Comunista son espacios vivos al servicio del pueblo y de la clase trabajadora. Reuniones, charlas, debates, convivencias, guardar materiales, hacer la cola para los carteles… son el día a día de una sede comunista que muchas veces se queda pequeña para el trajín que la militancia del PCE asume.
El tener un sitio más grande, acogedor y en propiedad del Partido, han sido las razones que han llevado al Núcleo del PCE en Olivenza a cambiar de sede y adquirir un nuevo local que se ha inaugurado este sábado 14 de octubre. La jornada comenzó con una ponencia a cargo de José Mariano Fernández López sobre la historia del populoso barrio de La Farrapa, lugar donde se ubica el espacio en esta localidad fronteriza de la provincia de Badajoz.
A continuación se celebró una comida de fraternidad y camaradería, en donde la militancia aportó comida para compartir donde no faltaron platos típicos extremeños y portugueses. A la hora del café le acompañaron los dulces y como no podía ser de otra manera, una camarada llevó una técula mécula casera, el tradicional y delicioso postre oliventino.
En la sobremesa se realizó el acto más político con un encuentro con Cristóbal Guerrero, secretario político del PCE en Extremadura, quien realizó un repaso del complejo panorama actual para la clase trabajadora y del papel de las y los comunistas, llamando a la organización en las filas del Partido Comunista y la extensión del mismo como única manera para avanzar hacía la toma del poder político, el control de la actividad económica y, por tanto la superación del sistema capitalista y la construcción del socialismo en el Estado Español, como contribución al tránsito hacia el socialismo en el plano mundial, con la perspectiva de la plena realización del ideal emancipador del comunismo.