Como cada año en enero en distintos puntos de Alemania se conmemoró a Karl Liebknecht y Rosa Luxemburg. Los dos cofundadores del Partido Comunista de Alemania que fueron asesinados el 15 de enero de hace 104 años por los Freikorps fascistas con la aprobación del ministro de Guerra socialdemócrata, Gustav Noske.
La manifestación que se ha celebrado en Berlín ha estado marcada por la denuncia al gobierno federal, el cual está liderado por socialdemócratas y está apoyando la guerra de poder de la OTAN contra Rusia, mediante el suministro de armas a Ucrania, mientras desarrolla una gigantesca carrera armamentística en su propio país.
La reivindicación del compromiso de Liebknecht y Luxemburg contra el militarismo y por el socialismo, fue el hilo conductor de la manifestación, la cual movilizó a más personas que el año anterior. Hubo entre 12.000 y 13.000 participantes y el resultado fue una manifestación muy compacta con muchos jóvenes y muchas banderas, un representante de los organizadores dijo al diario jW que estaba satisfecho con la forma en que se dieron las cosas.
«Karl Liebknecht ya lo dijo: el principal enemigo está en su propio país», se coreaba desde un bloque de activistas en su mayoría jóvenes. Mientras tanto, el presidente del Partido Comunista Alemán (en alemán: Deutsche Kommunistische Partei, abreviado DKP), Patrick Köbele, exigió desde una camioneta con un altavoz la paz con Rusia y China y el fin de la guerra económica contra Moscú. Las consecuencias de la guerra también se sienten en Alemania en forma de un fuerte aumento del precio de los alimentos y la energía.
Además de las imágenes de Liebknecht y Luxemburg, también se exhibieron numerosas imágenes de Lenin. »Lenin demostró que el imperialismo significa guerra«, señalaban los manisfestantes, reivindicando que el líder revolucionario ruso debe ser una »guía para la izquierda« hoy.
(*) Con información de Junge Welt